Algo que los abnegados itinerantes de nación tienen asegurado es el derecho a vacaciones, puesto que todos ellos practican la itinerancia kikil como un trabajito remunerado -a costa de los de siempre- y con tiempo de vacaciones -cuyos desplazamientos y estancias en destino también cubren los de siempre-. El gran jefazo es el primero que da ejemplo al respecto.

Un amigo del blog me ha hecho llegar el audio de uno de tales mítines a cargo de un itinerante de nación centroamericana de vacaciones por su tierra natal en época estival. El mitin, que se suponía una arenga a los jóvenes para instruirles sobre la moral sexual cristiana, es un rollazo. El mitinero es aburrido, sin gracia, sin chispa y no se aprecian en el mismo verdaderos conocimientos de moral cristiana, en cambio, sí parece un loro bien instruido sobre los mantras de cierto itinerario que no lleva a ninguna parte.
Pero mejor trato de hacer un resumen de lo que este individuo -uno de los 72 del colegio de electores- largó por la boquita.
En primer lugar tenía que meter el CVII de alguna manera. Es una obsesión que tienen los neocatecumenales, hay que nombrar el CVII como sea y hacerse pasar por hijos del mismo. Pero en este caso, la mención, llevada por los pelos, desemboca en una sorprendente declaración que revela el profundo conocimiento que tienen los itinerantes de los planes demoniacos, casi como si fuesen íntimos del demonio y este les confiase sus secretos. Porque lo que este hombre dijo fue que de la misma forma que hubo un Concilio Vaticano II, también los demonios, por envidia, organizaron su concilio para acordar qué hacer para destruir a la humanidad. Y llegaron a la conclusión de que lo mejor era atacar a los jóvenes con la pornografía que, según este menda, existe porque existe internet que es una herramienta del maligno.

Así, se despachó con las siguientes afirmaciones:
□ Hay 613 mandamientos en el Pentateuco. -¿Y a mí qué?
□ El primero de todos es «Creced y multiplicaos». -¿Esto era una charla para jóvenes solteros?
□ En la antigüedad, un judío a los 20 años tenía que estar casado para darle hijos a dios. -Lamentablemente se le olvida aclarar que ese dios no es nuestro Dios y que en esa antigüedad tan antigua la esperanza de vida de los varones posiblemente no pasaba de los 50 años de media.
□ Un joven a los 13 años ya era considerado adulto. Y una chica a los 12 años, con la primera regla, ya era considera casadera. -Donde dice adulto no se refiere a libre de la autoridad paterna, sino a casadero, pero siempre sometido a la decisión del padre, que será quien negocie el casamiento. ¿Y qué tendrá esto que ver con la moral cristiana? Ya me gustaría saberlo.
□ Dios prepara a la mujer para ser madre. -El rollo venía a decir que lo único que ese dios -que no es el nuestro- quiere de la mujer es que tenga hijos. En otras palabras, que no es esfuerce mucho por estudiar ni por ser una profesional, lo que tiene que hacer es casarse pronto.
□ No es bueno que el hombre esté solo. -Ya, pobrecito, que cuando no hay futbol en la TV se aburre.
La cosa seguía con advertencias sobre la muerte que caerá sobre todo aquel que derrame su semilla por tierra, para que a los chicos les quede claro hacia donde tienen que encaminar sus apetencias. Y la conclusión del ponente era que en el judaísmo la sexualidad es sagrada. Lo que inevitablemente me lleva a pensar en los dioses paganos que se dedicaban a organizar orgías y a procrear entre ellos. En el paganismo, con dioses caracterizados por sus apetitos sexuales, no negaré que la sexualidad fuera un rasgo divino y, por lo tanto, sagrado. Pero en una presunta charla sobre moral sexual cristiana, me parece fuera de lugar. La sexualidad es humana, y animal, por cierto.

□ Dios lleva tu historia con una precisión de relojero suizo. Por tanto, un día te pondrá delante la mujer o el hombre destinado para ti y tú la/lo reconocerás.
□ Está mandado, dice: No te casarás con un pagano, con una cananea. O te pasará lo que a Sansón por encapricharse de una pagana.
En este punto se detiene mucho y pone de relieve que son los padres quienes deben encauzar el interés de sus hijos, es más, como quien no quiere la cosa, se hace ver que la obediencia al padre es más importante que la opinión de los hijos. El ponente cuenta que Rebeca e Isaac no se conocían, pero ambos se fiaron de Dios, en la persona de sus padres que fueron quienes negociaron el enlace.
Luego cuenta la historieta de la piedra que movió Jacob para abrevar el rebaño de Raquel. Sigue con las peripecias de José en Egipto y llega a la conclusión, el tipo sabrá cómo, de que la castidad de un hombre salvó no solo a Egipto sino al mundo entero.
Y por fin parece que se centra un poco y retoma el tema de que los noviazgos cuanto más breves mejor, y si resulta que los novios ni se conocen, no importa, mientras los padres estén de acuerdo en proceder a la unión de sus familias. -¿Moral cristiana? ¡Lo que yo te diga, prima!-Y el mejor ejemplo es la historia de Tobías, que se va a desposar a una joven a la que no conoce porque así lo ordena su padre, en contra de los deseos de la madre.

Pero lo mejor es cuando asegura que el noviazgo es muy importante, es tiempo para conocerse, tiempo de no tocarás. Y que el ejemplo es Tobías. -¿Comor? El que según se presentó, el mismo día que conoce a Sara, se va a la alcoba con ella. ¡Ah, claro! Es que lo que hicieron en la alcoba fue quemar entrañas de pescado -lo que suena muy gnóstico y muy de paganos supersticiosos- y rezar antes de consumar su unión.
El mitin se extiende bastante más, pero por no alargar mucho esta entrada, lo dejo para la siguiente.